Los últimos pasos del proceso de aplicación de las TIC a un proyecto de Arqueología son la puesta en valor y desarrollo económico y potenciar la participación ciudadana.
Para valorar el proyecto se ha de tener en cuenta la rentabilidad cultural y socioeconómica. Junto a ello considerar el patrimonio como factor de desarrollo sostenible y así se crearán los centros de interpretación, de recepción ciudadana donde se aplicarán el uso de las TIC directamente, pues como bien se sabe, son una herramienta del turismo cultural. Como ejemplo práctico sería el diseño de rutas turísticas que incluyan el centro (como en el caso de Alhama de Murcia y el museo de "Los Baños"), el consumo de productos culturales, etc...en definitiva, comercializar y sacar beneficio económico.
Por todo ello la participación ciudadana es fundamental, y se ha de potenciar mediante la movilización y organización de la misma, siempre en concienciación de salvaguardar el patrimonio.
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